EL FINAL MENOS PENSADO
En el mejor momento de Boca, cuando lo había empatado con un golazo de tiro libre de Riquelme, llegó el cabezazo de Funes Mori que le dio el triunfo a River por 2-1 después de diez años sin triunfos en la Bombonera. Duele en el alma.
Estuvo ahí, al alcance de la mano, parecía que Boca se quedaba con el triunfo después del empate de Román con una perla de tiro libre. Pero sobre el final todo se desvaneció y
River cortó todas las rachas adversas. El primer tiempo del partido más esperado por todos fue, si se quiere, de estudio. Ambos tomaron recaudos en el fondo e intentaron ir a buscar el primer gol de la tarde, pero algunas malas definiciones de los dos bandos hicieron que la etapa inicial pasara en blanco.
Y todo lo que no pasó en la primera mitad del partido sucedió en la segunda. Boca tomó la iniciativa pero fue sorprendido por un pase de Teo (en posición adelantada cuando nace la jugada) a Lanzini que el enganche definió. Lo mejor de la tarde vendría en una pincelada de Román en un tiro libre, que superó a Barovero y renovó ilusiones en toda la Bombonera. Insúa lo tuvo con un remate de afuera del área y parecía que se podía dar vuelta la cosa, pero un tiro de esquina (que no existió) le permitió a Ramiro Funes Mori vencer a Orión y firmar el 2-1 decisivo para River. Así, Boca suma 12 derrotas con Pitana como árbitro en 22 juegos.
Y así se fue el gran clásico del fútbol argentino. Boca tuvo sus chances pero no las definió y terminó quedándose sin nada ante un rival que parecía conforme con el empate. Ahora, momento de pensar, entrenar y corregir errores para que la visita a Rosario sea más productiva. Y dejar atrás este tropezón.
Fuente: BocaJuniors.com.ar